jueves, 30 de septiembre de 2010

Lo que me conmueve

“Por eso creo que, si existe un paraíso y es de los inocentes, pertenece a aquellos cuyo intelecto está sometido a su corazón: a los animales, los niños a quienes aún no hemos podido contaminar y a E.T. Debe ser senilidad, pero cada día me conmueven más las películas sobre utopías, amores imposibles y héroes incomprendidos; las novelas acerca de perdedores totales. Los amigos que no triunfan, pero siguen enteros - la integridad de quienes no han pisado a nadie a pesar de las patadas recibidas- y ese rumor de sombra fresca irremisiblemente condenada al fracaso que advierto a mi alrededor, apenas perceptible entre el griterío de triunfadores airados dominante”.

Maruja Torres – “Como una gota”.

miércoles, 29 de septiembre de 2010

Papeleras y propiedad privada

Salgo de clase, cojo la bici (que siempre me ayuda a aclarar ideas) y al llegar a Passeig de Grácia tiro el corazón en la primera papelera a mi alcance (total, tal como está sólo sirve para latir). Me siento más ligera, pero se me acaba pronto…

Son casi las 15h, una caravana de furgones de los antidisturbios (sería más correcto llamarlos disturbios-por-cuenta-propia) invade impunemente la calle.

Paso despacito y escucho:” tapar las fachadas, que no se suban por ninguna parte.”

Sigo bajando, ya sé que están hablando de la ex sede de Banesto en Plaza Catalunya ,okupada desde el 25 de Septiembre y también intuyo que van a desalojar - cargar, aprovechando que es huelga general y que los sindicatos se van a concentrar en la mismísima plaza dentro de nada. Que casualidad… Pero durante la Mercé no podían desalojar, no, que son las fiestas, que pensarían los turistas? Que somos una panda de salvajes?

Ocupar la ex sede de un banco es un gesto cargado de evidencia en el momento en que se critica duramente el capitalismo…

Han quemado un coche de policía – “Vaya barbaridad! Vándalos, así no se puede luchar!”

Ah no? Y como se lucha, entonces?

Esperamos todos a estar en la calle, por no tener € para pagar un alquiler? Y revolviendo los contenedores de basura donde los supermercados tiran los productos caducados?

Me parece bien más honesto quemar un coche de policía, que fingir que aquí no está pasando nada “mientras tenga mi sofá, con el mando a distancia y un partido del Barça, claro!”

Tiro mi último kilo de paciencia en una papelera de la Rambla, miro hacía dentro y veo que alguien ha dejado 1 Kg. de valor. Lo cojo, me viene bien para vivir sin corazón.

Me adentro en el Raval…



***La librería Europa ha sido destrozada hoy por cerca de 20 personas. Que lástima que el dueño sea un nazi, responsable de la difusión de ideas genocidas… Basta con mirar las obras del escaparate para que te entren dos arcadas de estupefacción! Pero ahí sigue, nadie la cierra…

sábado, 25 de septiembre de 2010

Directamente do coração,

Abro os olhos, estou viva e a minha filha ri-se. Não esqueço não me perdoo esmago as lágrimas que já não suporto e a merda das emoções e desisto e rendo-me e não posso e sufoco e rio-me e desfaço os nós dos cabelos das crianças, rio-me e não me esqueço de ti e estou só e de noite tenho medo e sinto o sol na minha pele e dói-me a lua nova e quero mais, não quero nada, deixar de ser vulnerável de esperar tudo sem esperar nada e volto a abrir os olhos ao som de uma música sem notas.

Percebeste? Eu sei que não.

martes, 21 de septiembre de 2010

Algo falla

El tiempo no está haciendo lo que se supone que es su trabajo:

Hacer aceptar, entender, concluir, olvidar, perdonar(se), aprender

y curar.

domingo, 19 de septiembre de 2010

Deslizando en el Domingo

La mañana es brillante después del llanto que ayer cayó del cielo.

Hoy no tengo el dulce despertar de mi hija – Mami, tienes sueño? Puedo saltar en tu cama? – que suele sacarme de la compañía de Morfeo.

Sus pelos me hacen cosquillas en la nariz y su sonrisa se estabiliza a 2cm de mi cara.

Bueno, pero hoy no la tengo y quizá el destino (y nuestra intervención en el) sea sabio y el hecho de regalarme tiempo para mi, sea eso mismo, un regalo.

El desayuno es perezoso, la ducha más aún, y después la bici. Deslizo por el barrio, entre la gente que tiene pensamientos secretos para los demás, tal como yo.

Calles mojadas, cristales rotos de la noche anterior, olor a especias, turistas intentando cristalizar momentos.

Ruedo hasta el mar, donde me gusta perder la mirada. Disfruto de un cigarrillo y del sol en mi piel mientras envidio los veleros atracados en el puerto.

No tengo prisa, aún menos de vivir, y no es porque sea Domingo.

sábado, 18 de septiembre de 2010

Intento porque siento


Viernes – 9.30h de la mañana. Clase de expresión corporal.

Ejercicio: Dejar que el cuerpo siga la música.

No es lo mismo que bailar, aunque a veces se le parezca. No se busca un resultado estético, sino que funcionen solamente el cuerpo y las emociones.

Vencer la timidez.

Los compañeros de clase observan y yo me quito los zapatos.

Estoy sudando. Sudo, aunque cada vez quepan menos secretos entre nosotros (las dinámicas de grupo de Yolanda aniquilan los miedos inconfesables…)

Pero ellos aún son los “otros”, y yo, un cuerpo con mente y alma.

Respiro hondo. Suena “La Fuerza” de los Facto Delafé y Las Flores Azules.

Cierro los ojos, ellos ya no están, yo tampoco, sólo mi cuerpo que gira como una pelota loca. Me caigo y sigo girando en el suelo sin tocarlo con los pies.No pienso y no soy, sólo siento y estoy. Viva.

Cuando me sento, dando paso a otro, mis piernas aún tiemblan. El corazón, desbocado, me agradece por perder el miedo al ridículo, a los demás, a equivocarse y a caer.

Entre lo mucho que pasa por mi mente a la velocidad del latido, comprendo que los actos de cada uno contienen sus propias razones, aunque sean incomprensibles para todos los demás y que a veces es necesario escoger entre pensar y sentir para no quedarse paralizada.

Comprendo que sentir no es controlable, así que no sirve de nada luchar conmigo misma. Es más honesto echarte de menos.



miércoles, 15 de septiembre de 2010

Gafas de piscina

Le dije que se pusiera mis gafas de piscina para cortar cebolla.

Al contrario de lo que suele pasar cuando lo digo, me hizo caso y no me miró como se yo fuera marciana.

Bebimos una Voll-Damm a medias mientras ella picaba cebolla en trozos cada vez más pequeños, tan pequeños como emociones trituradas.

Me dijo: “Porqué no me dice lo que piensa? Porque no quiere hablar conmigo? No sé interpretar un puto silencio, no es más fácil hablar?”

La cebolla se deshacía ya en partículas olorosas.

Le contesté que no, que para algunas personas no es nada fácil hablar, sobretodo de sentimientos, sean ellos cuales sean.

“Sabes qué?” – Soltó el cuchillo y dejó caer los brazos, con las manos de dedos largos abiertas – “No vuelvo a enamorarme. Nunca más”.

La cerveza densa y el sabor de la malta bajaran por mi garganta ayudándome a tragar la estratopausa y sorbí el olor del cilantro antes de pasárselo.

“Crees que debería buscarlo? Habrá perdido mi teléfono?”

Le sonreí y dije que no, que si el no la buscaba sería porque no quería encontrarla.

Se sacó las gafas y secó las lágrimas – “Vés? Esta mierda no funciona”.

No es de la cebolla - le dije mientras me reía y la abrazaba – Porque lloras por alguien que ni siquiera sabes como és y que no sabe nada de ti?

Enterró la cabeza en mi hombro y me preguntó porque no la tomaba en serio.

Le dije que no, que estaba equivocada, que la tomaba tan en serio que tenía que reírme, mientras pensaba, que este Verano ha cerrado algunos corazones y que tenía que comprarme unas gafas de piscina nuevas.

martes, 14 de septiembre de 2010

Profecía de la inseguridad

A veces, el miedo a no poder retener un globo, hace con que tus dedos lo suelten.

O, en otras palabras, profecía auto-cumplida.

lunes, 13 de septiembre de 2010

Ecos de asas partidas


Perguntas sem resposta que ecoam e rodopiam como pássaros de asas partidas.

E eu queria ser um barco e navegar fora de mim.

jueves, 9 de septiembre de 2010

Desde Estratopausa


“Instalei-me numa espécie de doce fracasso, de tristeza habituada aos sonhos impossíveis e fiz disso o meu próprio inferno e meu íntimo paraíso: assim, a meio do caminho, eu não tenho já um destino para te oferecer, nem tu terias a fraqueza de aceitá-lo”.

Susana Fortes - “Querido Corto Maltese”


Y desde la estratopausa, te echo, estúpidamente de menos.

Como se borra la memoria?

miércoles, 8 de septiembre de 2010

Sin sentido III

Donde irá toda la emoción que no llega a su destinatario?

Servirá para algo, una emoción intensa y que no llega a quien es dirigida?

Quedará acumulada en cualquier punto de la estratopausa?

Dicen que el aire caliente sube.

Algún porcentaje quedará dentro de nosotros, y después?

Pasará lo mismo que a los pétalos de las flores que secan o se pudren?

Entre risas y cabellos, Laura y yo escuchamos Ramones ("A TRIBUTE TO" -We´re a happy family) bailando descalzas por todo el piso.

Decido que me quedaré aquí en la estratopausa, donde ninguna mirada me volverá a robar el alma.

http://www.youtube.com/watch?v=npTnPfJhBZY

sábado, 4 de septiembre de 2010

Desnudarse por dentro

Hay cosas que entiendo poco a poco.
También os pasa?

Si veo la ropa como una piel “social”, y la piel dermatológica como lo que somos por naturaleza, desnudarme por dentro será como retirar capas que no me permiten verme a mi misma.

Descubrí, que apartando la capa del miedo a un lado, y la de lo que a mi me gustaría que fuera la realidad (ya, ahí viene la palabra…) a otro, en el medio queda algo muy racional, o sensorial(¿).

Aún más en el centro hay otro instrumento que por veces no sé utilizar: la intuición.
Las señales que capto en los demás y me permiten llegar a información sobre el otro.
Para que sirve? Para poder entender y comunicar mejor, supongo.

Creo que, definitivamente, me quedo con la intuición. Talvez porque el racional me acaba empujando a una falsa protección, buscando la seguridad de aquello que controlo. No arriesgando nada…

El miedo y la imaginación, son, muchas veces, lo que me impide transmitir lo que realmente me gustaría.
Hace poco, he huído, literalmente, de algo que quiero tener cerca.
Imbécil no?
Bueno, lo estoy pagando…

jueves, 2 de septiembre de 2010

Imagina


Tal como el Atlántico, mi imaginación, tiene la capacidad de aprisionarme y/o liberarme.

Mi querido Océano, dejarías esta marciana nadar tranquilamente durante el próximo siglo?